martes, 12 de junio de 2018

Anaya el mentiroso


Por Héctor Alfonso Rodríguez Aguilar

Anaya y Peña Nieto aliados para las reformas, hoy el candidato usa discurso falso que es antisistema. 


Darle el calificativo de mentiroso al candidato de la coalición "Por México al Frente" Ricardo Anaya queda muy corto para lo que realmente es este personaje. No cabe duda que su persona en su actuar y en su decir, como lo diría un psicoanalista, es Maquiavelico y su retórica está llena de falacias, es decir, sencillamente es mentirosa y simuladora. 

    En su primer afán de ser el candidato por su instituto político, se dio a la tarea sin importarle la forma  precaria en que quedó el PAN después de las elecciones federales de 2012, dividirlo o polarizarlo para que fuera él y no Margarita Zavala que obtuviera la candidatura. Este hecho trajo serias consecuencias de división en Acción Nacional. A tal caso, que el grupo de los Calderón buscaron la candidatura independiente al ver que no contaban con el apoyo copular del  PAN. Otros sencillamente se fueron al PRI, y lo menos buscaron cobijo en Morena como es el caso de Manuel Espino y Germán Martínez (que eran nada menos que presidentes de este instituto en su momento).

    Por otro lado, Acción Nacional se encuentra desgastado políticamente, por su poca eficacia a la hora de gobernar el país, sobre todo en el poder ejecutivo federal. Luego, otro desgaste le viene por haber abandonado su ideario o ideología que venía desde su fundador Manuel Gómez Morín. El hecho de haber continuado el neoliberalismo político y económico que ha perneado en la política del país por más de 35 años en las últimas administraciones federales ha llevado al conservador Acción Nacional a su debacle.  

     Ante este panorama desolador y poco optimista, se le ocurre a este "bambino" de la política (Anaya) aliarse con uno de los peores partidos políticos de la historia reciente de México, el neoliberal Partido de la Revolución Democrática, mejor conocido como el PRD. Partido que ha traido muchos males a México, como es el caso en el Ciudad de México, de haber aprobado el aborto, la unión de parejas del mismo sexo y sobre todo tener la peores prácticas y mañas que por años el PRI ha tenido y tuvo en su vida política. Es tan malo el PRD que hasta retiró su ideología de izquierda para hacerse pragmático y neoliberal, hasta su propio padre fundador Cuauhtémoc Cárdenas lo abandonó retirándose definitivamente del mismo.

    Ante todas estás aberraciones del PRD, la mayoría de sus miembros lo abandonaron, quedando este instituto político como vulgarmente se dice, en puros huesos. Y de muy poco le sirve en el frente que encabeza el PAN. Pero también Anaya es un candidato poco viable para este maltrecho frente. Su candidatura se ha carecterizado en su campaña de ser un reverendo mentiroso, en cada discurso en cada declaración y en cada entrevista echa una sarta de mentiras, que sólo él se las cree. Además que conocemos que en su actuar es poco leal, al dejar fuera a Margarita como le dijimos. De haber sido Margarita Zavala la candidata del PAN, ella hubiera obtenido infinitamente más votos que los que dará su actual candidato. 

     Y un discurso falso que trae en campaña, es que se dice, ahora sí, estar en contra del sistema (anti sistémico) cuando él como presidente de su partido, le siguió el juego a Peña Nieto y aprobó las dudosas reformas de gobierno implementadas en la actual administración ejecutiva del país y que han resultado hasta ahora un verdadero fiasco. 

    Luego para colmo de males, va a decir a la Universidad Iberoamericana de los jesuitas, ante aquel sector estudiantil de la burguesía chilanga, que el presidente Enrique Peña Nieto es corrupto. No viéndose la "zorra" la colota que trae, de investigación de lavado de dinero por negocios turbios en su estado natal Queretaro. Con la forma como el gobierno federal lo viene golpeando, y todos esos pésimos antecedentes que trae, se prevee para él y su coalición una catastrófica derrota que de resucitar los antiguos miembros y fundadores panístas como es Efraín González Luna o Manuel Gómez Morín y ver lo que han hecho éstos de su partido se volverían a morir.

     

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